El Correo Gallego
martes, 2. oct. 2007
Sin tiempo para reponernos del duro mazazo que supuso la contaminación por vertidos de purín de varios kilómetros de un afluente del río Furelos, en Melide, donde aparecieron millares de peces muertos, el castigado Sar volvió a encender ayer nuevamente las alarmas en Padrón por otro vertido que se estima afecta a unos diez kilómetros de cauce y ocasionó una nueva mortandad de peces. Y mañana será otro, y otro más...
¿Realmente hay alguien interesado en acabar con esta siembra de muerte en nuestros ríos? ¿Cuando, a través de la ejemplaridad de las sanciones, conseguiremos llevar el temor, sino el convencimiento, a tanto desaprensivo?
miércoles, 10 de octubre de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario